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Pese a que no consiguió la victoria, Marcus Stroman realizó una apertura inolvidable en su carrera en las Grandes Ligas frente a Los Ángeles Dodgers el pasado domingo 23 de abril. El lanzador de los Cachorros de Chicago alcanzó los 1,000 ponches de por vida en la MLB.
El serpentinero, quien representó a Puerto Rico en el pasado Clásico Mundial, atraviesa un gran inicio de temporada con los Cubs y escribió su nombre en la historia de Las Mayores al ponchar a Freddie Freeman, en la parte alta de la tercera entrada del partido.
El chocolate que le propinó al inicialista de los angelinos fue el tercero que lograda en la jornada y de esta manera convirtió en hazaña su salida al aterrizar a los 1,000 de por vida en la Gran Carpa.
El derecho neoyorquino lo logró en su novena campaña en la MLB después de vestir a tres organizaciones en lo que va de carrera. Stroman debutó en la temporada 2014 con los Azulejos de Toronto, donde permaneció en gran parte de su trayectoria, luego pasó por los Mets de Nueva York y ahora atraviesa su estadía con la tropa de Chicago desde la pasada zafra.
Después de una participación destacada con el Team Rubio en el World Classic, el diestro ha comenzado a todo tren la temporada con los Cachorros, convirtiéndose en una de las caras del equipo en el arranque de año.
El abridor presenta numeritos de dos victorias y par de reveses, 30 ponches, WHIP de 1.00, 11 pasaportes, 29.0 innings de labor y una efectividad de 2.17 en cinco aperturas.
Aunque llegó a la cifra histórica, el lanzador no tuvo una de sus mejores apariciones en el montículo y se llevó su segunda derrota en la campaña al permitir cinco carreras, seis hits, boleto y logró cinco abanicados en cinco capítulos completos.
Stroman terminó su presentación en el Wrigley Field con 1,002 chocolates después de haber trabajado un total de 1,196.0 episodios en lo que va de carrera en el Big Show.