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Tal vez sea la gran duda en el universo de Yankees al momento de darle forma a este texto; pocos se atreven a tocar el tema siquiera o al menos como debe ser, pero es así, a falta de un mes para que arranque la acción en la nueva campaña de Grandes Ligas, una interrogante matiza el día a día en el entorno de los Bombarderos del Bronx…
¿ Cuál es el Giancarlo Stanton que veremos en 2023? irrumpe la pregunta y al instante, las analogías se imponen con su propio calado; en un primer plano, está aquel jugador que cinco años atrás, en 2018, durante su primera campaña con el uniforme de los Bombarderos del Bronx, pegó 38 jonrones e impulsó 100 carreras, volviendo a quedar entre los finalistas en la votación para el MVP. A su vez, como en otra dimensión, se encuentra también el Stanton que en 2022, si bien dio 31 bambinazos y fletó a 78 compañeros para el plato, apenas compiló para un average de 211, dejando el OPS más bajo de su carrera, 759.
Otra vez, el tiempo
Han transcurrido 13 años desde aquel día cuando Stanton debutó con los Marlins en 2010 y en este sentido resulta imposible olvidar campañas como aquellas del 2014 y de 2017, el irrefutable MVP, los 59 jonrones y las 132 impulsadas y luego en el Bronx, esa zafra de la que hablamos en 2018 y también la de 2021, cuando tras par de temporadas limitado por las lesiones, regresó a lo grande, conectando 35 cuadrangulares y remolcando 97 carreras.
Esa es la consistencia que quiere ver la exigente afición de Yankees, pero está el tema de la salud de por medio y todos ya saben que Stanton depende en total medida de ese aspecto, pues estando en forma óptima, es indudable su impacto con el madero y ahí están sus 378 vuelacercas de por vida para demostrarlo.
Será determinante
A esto se aferran Aaron Boone y la gran mayoría de los fieles, al hecho de tener a Giancarlo Stanton con salud para el Opening Day, sin embargo, una perspectiva subyace de modo insidioso en este punto y es que a los 33 años con esos 111 kilos de peso, todavía luciendo como una mole y pegándole como pocos, el riesgo de nuevas lesiones está latente.
Stanton confía, sabe que en buena medida, el destino final de los Bombarderos del Bronx puede pasar por su rendimiento a la ofensiva; por ello cree que puede cumplir con el trabajo y aportar su grano de arena para un gran año de los Mulos de Manhattan, tal como lo declaró en días recientes al periodista Bryan Hoch…como sea habrá que esperar y dejar que el terreno sea quien nos diga la última palabra.