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Gorra calada, ladeada al costado, ceño fruncido y una mirada de esas, fría, en extremo, como pocas, cual asesino en serie y pudiera ser esta la mejor manera de comenzar, como también podría haber sido, contando sobre sus primeros pasos en Colorado, cuando apenas tenía 17 años.

Sin embargo, su personalidad siempre llamó la atención, era una de esas donde emergían esos rasgos de los que hablamos al principio, los mismos  que definían su estampa,la clásica estampa de un hombre marcado por los ritmos azarosos del tiempo y esa necesidad constante de reinventarse, simplemente para poder sobrevivir.

El perfil

Durante casi 10 años, Pedro Strop fue un lanzador eficiente, puede que sin mucho ruido, uno de los relevistas más consistentes de Las Mayores, durante el comienzo de la pasada década.

Sus números en este período nos muestran lo prominente que fue, al punto que el dominicano acabó erigiéndose una pieza clave en el bullpen de equipos como Vigilantes de Texas, Rojos de Cincinnati y Cachorros de Chicago.

Lanzó por última vez en la Gran Carpa allá por 2021 y fue algo efímero, apenas una entrada, sin embargo, de manera general, para ese entonces, Strop mostraba una impresionante hoja de servicios; 561 juegos trabajados, 505 entradas acumuladas, una efectividad de 3,20 y 32 juegos salvados.

Al mismo tiempo, el caribeño ostentaba un promedio de ponches de casi 10 por cada 9 innings, siendo un látigo con su prominente bola rápida y una excelente combinación de rompientes.

Momento cumbre

Está todo esto que hemos contado, es un hecho insoslayable, así como aquel anillo de Serie Mundial con los Cachorros de Chicago en 2016, pero sin dudas, el momento que marcó la carrera de Pedro Strop para siempre, fue aquel tercer Clásico Mundial…

 

Hoy, diez años después de aquella justa, horas después de haber dado inicio la quinta edición del máximo certamen beisbolero a nivel de selecciones, con los dominicanos aferrados al sueño de reconquistar la corona; hoy el recuerdo de Strop emerge como una de las grandes historias de aquel conjunto campeón en 2013.

Como lo lee, el oriundo de Palenque, allá en San Cristóbal, fue uno de los imprescindibles para el timonel Tony Peña, quien utilizó a Strop en seis de los ocho desafíos disputados en aquel torneo.

La estela

Terminó con marca de 3-0 en 6,2 innings de actuación, ponchando a 7 y permitiendo 3 hits y si los caribeños pudieron tomar venganza de lo ocurrido con Países Bajos en 2009, fue en gran medida debido al impacto de Pedro Strop en la semifinal.

Fue su consagración, atrás había quedado el recuerdo de aquel inicio como bateador y su posterior irrupción como pitcher y todo había valido la pena.

Tal vez por uno de esos avatares que cuece el destino, mientras escribo este texto, a sus 37 años, Pedro Strop está buscando volver a Grandes Ligas y otra vez, el Clásico Mundial se pinta como plataforma perfecta para tener ese impulso final que posibilite el regreso.

Un nuevo equipo

Lo curioso del suceso, es que el veterano no estará con Dominicana durante el actual torneo que arrancó este martes en suelo asiático; Strop es parte del combinado neerlandés que sometió a Cuba 4-2, en el partido inaugural efectuado en el Estadio Intercontinental de Taichung este 8 de marzo.

El serpentinero, nacionalizado holandés desde temprana edad, será sin dudas, una de las piezas claves para el mánager Hensley Meulens en pos de cumplir las expectativas concernientes al hecho de que los tulipanes puedan avanzar en la competencia.

Ya en el invierno, vimos una pequeña muestra de la condición en la que se encuentra Strop,  quien vistiendo la franela de los Leones del Escogido, dejó una efectividad de 3,50 en 12,2 innings, con 13 ponches.

¿ Qué versión veremos sobre el diamante?, el tiempo como siempre dirá, como sea, esta puede ser otra vez, como en aquel 2013,  una interesante historia a seguir  en otro atípico mes de marzo.