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El veterano lanzador sigue lidiando con molestias en la mano de lanzar, poniendo en duda su disponibilidad para el inicio de la campaña. 

Max Scherzer es sinónimo de competitividad y excelencia en el béisbol. Con una carrera que abarca dos décadas y múltiples premios, el derecho de 39 años sigue desafiando el paso del tiempo. Sin embargo, su pretemporada con los Toronto Blue Jays se ha visto marcada por un persistente problema en el pulgar derecho, una lesión que ha generado incertidumbre sobre su estado físico para el inicio de la temporada 2025 de la MLB.

El sábado, Scherzer tuvo una actuación dominante en la victoria de los Blue Jays por 2-1 sobre los Minnesota Twins, lanzando cuatro entradas en blanco, ponchando a cuatro bateadores y permitiendo solo una base por bolas. Pero la preocupación volvió a surgir tras el partido, cuando el lanzador dejó en claro que la molestia en su pulgar sigue siendo un obstáculo en su preparación.

Una lesión pequeña con grandes implicaciones

Scherzer describió la lesión como una inflamación en la articulación del pulgar, específicamente entre las articulaciones carpometacarpiana (CMC) y metacarpofalángica (MCP). Este problema afecta su agarre y ejecución de los lanzamientos, comprometiendo la precisión y el control de su repertorio.

“Es una cosa pequeña que se vuelve grande”, admitió el veterano. “Sé que puedo lanzar al más alto nivel, pero el problema es la recuperación. No quiero que esto se convierta en algo peor.”

La lesión se asemeja a un tipo de tendinitis que se intensifica con el uso, pero que tiende a disiparse una vez que el brazo entra en calor. Sin embargo, el verdadero problema radica en la respuesta del cuerpo después de cada salida, ya que la inflamación podría agravarse con el tiempo.

“Cuando estoy en el montículo, el dolor desaparece. Pero el problema es cómo reacciona mi mano al día siguiente. Eso es lo que me preocupa”, explicó Scherzer.

Los Blue Jays, entre la precaución y la urgencia

Toronto firmó a Scherzer en la temporada baja con un contrato de un año por 15.5 millones de dólares, esperando que su experiencia y talento fueran piezas clave en su rotación. A pesar de su edad, el derecho sigue demostrando su capacidad para dominar a los bateadores, con una mezcla de rectas, sliders, curvas y cambios que siguen siendo efectivos, incluso si su velocidad ha bajado ligeramente.

Byron Buxton, estrella de los Twins, destacó la calidad del lanzador tras enfrentarlo el sábado:

“Aunque su velocidad ha bajado un poco, sigue siendo el mismo lanzador de siempre. Y si me preguntas, parece que ha mejorado aún más.”

Sin embargo, la pregunta sigue siendo si los Blue Jays pueden permitirse correr el riesgo con un Scherzer que no esté al 100%. Si bien el derecho está programado para lanzar entre 75 y 80 pitcheos en su primera apertura de la temporada, su disponibilidad para el Día Inaugural sigue en duda.

El objetivo: un nuevo anillo de Serie Mundial

Más allá de sus preocupaciones físicas, Scherzer tiene una meta clara en mente: ganar otro campeonato. Su llegada a Toronto no fue solo por el contrato, sino por la posibilidad de contribuir a un equipo que busca dar el salto definitivo en la Liga Americana.

“Vine aquí porque quiero ganar la Serie Mundial,” afirmó con determinación. “Eso es lo que me motiva todos los días.”

Para que los Blue Jays logren ese objetivo, necesitarán a Scherzer en plenitud de condiciones. Su lesión en el pulgar, por más pequeña que parezca, podría definir su impacto en el equipo. Mientras tanto, la organización y los fanáticos estarán atentos a cada actualización, esperando que la molestia no se convierta en un obstáculo insalvable en la búsqueda del éxito.

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