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La importancia de la población dominicana en las Grandes Ligas es innegable. Los toleteros locales han vestido de gala el mejor béisbol del mundo y con sus más de 800 presencias individuales en MLB son la presencia extranjera más numerosa y vistosa de la pelota norteamericana. Figuras del calibre de Juan Marichal, Pedro Martínez, Albert Pujols, David Ortiz y Vladimir Guerrero son orgullo de la tierra del merengue, entre otros tantos baluartes.

Por eso, es normal que la Major League Baseball y también las divisas que forman parte de ella tengan en gran estima y consideración no sólo a los atletas nacidos en Quisqueya, sino también a los millones de fanáticos dominicanos que, desde la tribuna, desde ese país o desde cualquier parte del mundo brindan su atención y apoyo a la Gran Carpa.

Merecido homenaje

Gracias a esto, los Lehigh Valley IronPigs, sucursal categoría Triple A de los Phillies de Philadelphia, tomaron la bonita iniciativa de jugar su partido de hoy con una casaca alusiva a los fans de la isla latinoamericana en cuestión. No obstante, lo harán de una manera bastante pintoresca y arriesgada.

No es que llevarán en su vestimenta una bandera de la República Dominicana o los colores de la misma, sino que ahora se llamarán Lehigh Valley Mamajuana, en una clara y más que evidente referencia a la popular bebida criolla. Para los que no saben, Mamajuana o Mama Juana es un licor que se prepara dejando que el ron, el vino tinto y la miel se empapen en una botella con corteza de árbol y hierbas. Su sabor es similar al del vino de Oporto y su color es rojo, muy intenso, todo un clásico dentro de la cultura local.

Sin dudas, una bonita forma de honrar a todos los nacidos en el país latino más beisbolero de todos.