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La victoria de los Denver Nuggets en las finales de la NBA ante el Miami Heat fueron históricas, ya que es la primera vez que la franquicia logra un título del mejor baloncesto del planeta y, además, lo hicieron en su primer intento teniendo como guía a un fenómeno como Nikola Jokic. Sin embargo, el luto abrumó la ciudad poco después de iniciar los festejos, ya que un tiroteo tuvo lugar en mitad de la alegría para ensombrecer el hito deportivo de la franquicia local.
Pasada la medianoche y pocas horas luego de la finalización del encuentro en el que los dirigidos por Michael Malone se coronaron, las armas de fuego dijeron presente en la celebración de miles de aficionados. Según los informes policiales 9 personas resultaron heridas, estando 3 de estas en estado crítico. Lo curioso es que sólo hay un sospechoso detenido y este, a su vez, forma parte de las 6 personas que salieron lesionadas, pero cuyas vidas no corren peligro.
¿Qué originó el trágico suceso?
De acuerdo con las pesquisas de los cuerpos de seguridad encargados de buscar la raíz del asunto, no existe aún una versión clara de los hechos. El vocero de la policía local, Doug Schepman, indicó que de momento continúan investigando. “Ocurrió en la zona donde había la mayor concentración de gente celebrando durante la noche”, refirió en parte de sus declaraciones.
No obstante, una de las versiones que poco a poco va tomando más relevancia en redes es la de que el júbilo que inundaba las calles cercanas al Ball Arena no fue del agrado del individuo que decidió accionar su arma. Por otra parte, La organización Gun Violence Archive ha indicado que este sería el tiroteo número 290 que se registra en el país en lo que va de año. La ONG considera tiroteo aquellos ataques armados en los que se notifiquen, al menos, cuatro heridos sin contar al autor.