Your browser doesn’t support HTML5 audio

Son los Yankees de Nueva York y nunca pasan de moda y cuando de béisbol se trata, resulta obligado volver una y otra vez a comentar siquiera sobre la sonrisa fingida de Brian Cashman o el rictus amargo de Aaron Boone…lo que sea, pero hablar de los Bombarderos del Bronx es casi un ritual.

Ha sido así siempre, desde los tiempos remotos, allá cuando estaban Ruth y Gehrig, después con Joe DiMaggio y Mickey Mantle, hasta llegar a la era de Derek Jeter y como si de escenas de una novela de Cormack McCarthy se tratase, se ha impuesto la idea que en la historia de los Yankees de Nueva York se ha contado también la historia de Estados Unidos en los últimos cien años.

Yankees de Nueva York: entre la mística y la maldición

El imperio mal, los dueños de las 27 coronas, los del éxito perenne y entre el amor y el odio, el tiempo peso, pero los Yankees de Nueva York siguen ahí, como sinónimo de poder sin límites, a veces tocados por la gracia divina, en ocasiones, rodeados de sombras.

Con el final de la temporada regular en Grandes Ligas, los Yankees regresan a la palestra pública, pues con forja de 82-80, los Mulos de Manhattan, no solo quedaron fuera de la postemporada, además cerraron la actual zafra mirando de soslayo el fondo de la división este en la Liga Americana.

MLB: los Yankees de Nueva York y un 2023 para el olvido

En medio de este contexto unos siguen hablando de lesiones, otros de intermitencias en el rendimiento de varias de las figuras principales, como quiera han trascurrido 14 años desde aquel último título en 2009 y por ahora la espera parece ser eterna, al menos mientras él siga allí…

Ciertamente hablo de Aaron Boone, para muchos el gran culpable del nuevo fiasco, para otros el cómplice perfecto de Brian Cashman o simplemente el traidor a los principios e ideales de la franquicia más grande del béisbol.

Aaron Boone: el lastre de los Yankees de Nueva York

Seis años después, el timonel permanece allí, viviendo a la sombra de su récord positivo de victorias de 509-361, pero ensuciando cada vez más el uniforme de telas a rayas de los Yankees.

Llegó para ganar anillos de Serie Mundial y no lo ha hecho, debió ser el heredero de Joe Girardi, el alter ego de Joe Torre y de una manera u otra ha quedado a deber.

El rechazo hacia su persona es evidente y los reiterados abucheos en pleno Yankee Stadium refrendan el criterio, sin embargo, al instante de escribir este texto, todo apunta a que Aaron Boone cumplirá su contrato con los del Bronx y volverá en la temporada 2024.

La misión imposible de los Yankees de Nueva York… ¿será?

Así lo dejó entrever hace solo minutos el prestigioso reportero neoyorkino Andy Martino y sin dudas esta es ahora mismo la peor noticia para la fanaticada yankee, la misma que pide a gritos su salida.

Tal parece que encontrar un sustituto perfecto para Aaron Boone es una misión imposible o que tal vez por miedo o mera costumbre, el mentado Brian Cashman no se decide a blandir el martillo para dictar sentencia y acabar con el calvario.

Se ha especulado sobre la llegada de Don Mattingly, también acerca del regreso de Joe Girardi, no obstante Aaron Boone, como un pesado lastre, permanece ahí, ¿por cuánto tiempo será?… eso no lo sabe nadie.