Your browser doesn’t support HTML5 audio

Barcelona busca salvar la temporada en el tablero financiero

El FC Barcelona está tomando medidas urgentes para garantizar la continuidad de Dani Olmo y Pau Víctor, jugadores cuya inscripción en LaLiga ha sido objeto de disputas legales y financieras. Tras un revés judicial en el Juzgado Mercantil número 10 de Barcelona, que rechazó las medidas cautelares solicitadas por el club, la directiva liderada por Joan Laporta ha diseñado un acuerdo económico estratégico para cumplir con las normativas de LaLiga.

El plan contempla la cesión de los derechos de explotación de una parte significativa de los palcos VIP del futuro Spotify Camp Nou a un fondo de inversión qatarí por los próximos 20 años. Este acuerdo generará un ingreso estimado de 120 millones de euros, que permitirá al club azulgrana equilibrar su situación financiera y cumplir con los requisitos para mantener a sus jugadores inscritos en el organismo presidido por Javier Tebas.

Tensiones legales y financieras

El panorama para el Barça no ha sido sencillo. El rechazo inicial por parte del Juzgado Mercantil a favor de LaLiga obligó al club a buscar soluciones inmediatas. La directiva también está a la espera de una resolución adicional en el Juzgado de Instrucción número 1 de Barcelona, la cual podría influir en la decisión final de firmar el acuerdo con el fondo qatarí.

Por su parte, LaLiga ya ha recibido la documentación completa sobre la operación y está evaluando cada detalle. Desde el Barça, acusan al organismo de cambiar las condiciones previamente acordadas, como ocurrió con la renovación del contrato con Nike, que inicialmente parecía suficiente para cumplir con los requisitos financieros, pero finalmente fue descartada como solución.

El impacto del acuerdo: presente y futuro

La cesión de los palcos VIP no solo garantizará la inscripción de Olmo y Víctor, sino que también representa un paso importante hacia la implementación de la regla del 1-1, que permitiría al club inscribir jugadores con la misma proporción de ingresos generados. Actualmente, al Barcelona le faltan 60 millones de euros para alcanzar este objetivo, lo que complica su actuación en los próximos mercados de fichajes.

Además de este acuerdo, el Barça trabaja en otras estrategias para fortalecer su economía, como la llegada de nuevos inversores a Barça Studios. Estas medidas reflejan la urgencia de estabilizar la situación financiera del club y garantizar su competitividad en el mercado europeo.

Una solución bajo presión

Aunque el acuerdo con el fondo qatarí parece ser la solución más viable en el corto plazo, Joan Laporta es consciente de que con más tiempo habría podido negociar condiciones más favorables. Sin embargo, las exigencias y plazos impuestos por LaLiga y los tribunales han dejado al club sin margen de maniobra.

El desenlace de este episodio no solo determinará el futuro inmediato de Dani Olmo y Pau Víctor, sino que también definirá la capacidad del Barcelona para competir y operar en un entorno cada vez más exigente. La espera para el visto bueno final continúa, con el 31 de diciembre como la fecha límite para tomar decisiones clave que marcarán el rumbo de la institución en 2024.