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En el marco de la undécima jornada de las eliminatorias sudamericanas para el Mundial 2026, Ecuador y Bolivia medirán fuerzas este jueves en el puerto de Guayaquil, donde la Tricolor aprovechará la baja altitud y la humedad del suroeste ecuatoriano para complicar a un equipo boliviano acostumbrado a los desafíos de la altura en La Paz. Sin embargo, ambos equipos enfrentan un factor común: lesiones y sanciones que obligan a sus técnicos a mover estratégicamente sus fichas.

Para Bolivia, el encuentro en Guayaquil representa un reto no solo por el clima, sino también por las bajas significativas en su plantel. El estratega Óscar Villegas informó en rueda de prensa que ocho jugadores se quedarán en La Paz, algunos por lesiones y suspensiones, y otros en preparación para el decisivo partido contra Paraguay en El Alto, a 4.100 metros de altitud. Los bolivianos, séptimos en la clasificación con 12 puntos, ven en Paraguay a un rival directo por los últimos boletos al Mundial.

Consciente de la desventaja en condiciones climáticas, Villegas señaló que Bolivia buscará un planteamiento táctico que minimice los espacios para contrarrestar la velocidad ecuatoriana. Además, algunos de los jugadores que verán acción en Guayaquil debutarán con la camiseta verde, lo que añade un componente de incertidumbre al desafío.

Por su parte, Ecuador, quinto en la tabla con 13 puntos y una diferencia de goles favorable, llega con el objetivo de consolidarse en zona de clasificación. La ausencia de Moisés Caicedo, sancionado por acumulación de tarjetas, representa una baja importante en el equipo dirigido por el argentino Sebastián Beccacece. Sin su estandarte en el mediocampo, conocido como “Niño Moi” y habitual portador del brazalete de capitán, la Tricolor confía en mantener su estructura táctica para asegurar la victoria. Beccacece enfatizó en la necesidad de cerrar el año en una posición sólida y reconoció que este partido es una oportunidad ideal para mostrar la fortaleza del equipo.

El estadio Monumental de Guayaquil se alista para recibir el encuentro, que comenzará a las 19:00 (hora local), y estará bajo el arbitraje del argentino Nicolás Ramírez, acompañado de sus compatriotas Ezequiel Brailovsky y Gabriel Chávez. Será, sin duda, un choque de estrategias y adaptación, en el que Ecuador buscará reconciliarse con el gol y Bolivia intentará superar las adversidades del llano con miras a su duelo clave en casa.