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La casa de subastas RM Sotheby’s ha vuelto a capturar la atención de los fanáticos del automovilismo al anunciar la venta de un auto legendario: el Ferrari F248 de 2006, pilotado por Michael Schumacher en su última temporada con la escudería italiana. Este monoplaza no es solo un vehículo de alta ingeniería, sino un símbolo de la era dorada de Ferrari y del legado de uno de los pilotos más exitosos de la historia.

Reviviendo la historia: el auge de Ferrari en la era Schumacher

En los años previos a la llegada de Schumacher, Ferrari experimentaba una larga sequía de títulos. La llegada del director deportivo Jean Todt en 1993 y la formación de un equipo técnico de élite con Ross Brawn y Rory Byrne en roles clave transformaron la escudería. Gracias a un liderazgo efectivo y a una colaboración estratégica con Schumacher, Ferrari logró cinco campeonatos consecutivos entre el 2000 y el 2004, consolidándose como una fuerza imparable en la Fórmula 1.

Para la temporada de 2006, Ferrari presentó el F248, diseñado por Aldo Costa y optimizado con un motor V8 de 2.4 litros que respondía a las nuevas regulaciones. Schumacher, con el chasis 254, logró victorias memorables en San Marino y Nürburgring, superando a su rival Fernando Alonso y manteniendo a Ferrari en la lucha por el título. La consistencia del F248 permitió a Schumacher competir hasta el final de la temporada, ganando carreras en Indianápolis y Magny-Cours y dejando huella en el campeonato antes de retirarse.

Detalles únicos del Ferrari F248 y su temporada 2006

Este monoplaza, uno de los últimos utilizados por Schumacher antes de su primera retirada, se distingue no solo por sus especificaciones técnicas, sino por su historia en la pista. En el Gran Premio de Europa en Nürburgring, Schumacher demostró una maestría táctica al derrotar a Alonso con una estrategia de paradas que aprovechaba al máximo el rendimiento del F248. Aunque la temporada tuvo sus altibajos, el Ferrari se mantuvo en la contienda y fue determinante en varios podios. Finalmente, tras un incidente en Hungría, el monoplaza fue retirado de la competencia oficial, pero continuó en actividades promocionales, siendo conducido por pilotos como Luca Badoer y Felipe Massa.

La subasta: una pieza de historia a un precio millonario

El próximo 14 de noviembre, este Ferrari F248 se pondrá en subasta, con expectativas de superar los diez millones de euros. No solo se trata de adquirir un auto; el comprador podrá poseer un fragmento de la historia de la Fórmula 1, una máquina que fue testigo de la intensa rivalidad entre Schumacher y Alonso y que simboliza la transición hacia una nueva etapa en Ferrari. Antes de su entrega, el monoplaza pasará por un proceso de puesta a punto en Maranello para asegurar su óptimo funcionamiento, lo que permite al futuro propietario llevarlo a la pista o conservarlo como un tesoro de colección.

Una reliquia y un legado

Para los entusiastas de la Fórmula 1 y coleccionistas, esta subasta representa más que una oportunidad de poseer un auto histórico; es una conexión directa con los triunfos y la pasión que caracterizaron la era Schumacher. El Ferrari F248 no solo simboliza el cierre de un ciclo exitoso, sino también el comienzo de una era nueva con Kimi Räikkönen, sucesor de Schumacher en la escudería. Con esta subasta, RM Sotheby’s ofrece la oportunidad de inmortalizar uno de los momentos más brillantes de Ferrari y de revivir la emoción de aquella inolvidable temporada de 2006.