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El Abierto de Río de Janeiro 2025 ha iniciado con grandes expectativas, y Alexander Zverev, actual número dos del mundo, ha comenzado su camino en el torneo con una victoria trabajada ante el chino Yunchaokete Bu. El marcador de 7-6 (4) y 6-4 refleja un partido mucho más disputado de lo que se esperaba, en el que el alemán tuvo que salvar un punto de set antes de tomar el control del encuentro.
Zverev, que llega a Brasil como el principal favorito para quedarse con el título, supo imponer su experiencia en momentos clave del partido, a pesar de un arranque irregular en el primer set. Luego de una ventaja inicial de 3-0, el alemán se vio sorprendido por la reacción del chino, quien logró remontar y colocarse 5-4 arriba con su saque a favor. Sin embargo, la capacidad de resolución del germano prevaleció en el tiebreak, donde fue más preciso y aseguró la primera manga por 7-6 (4).
En el segundo set, Bu mantuvo la intensidad hasta el 4-4, pero Zverev elevó su nivel en los momentos determinantes y cerró el partido con un 6-4. Ahora, su próximo desafío será el kazajo Alexander Shevchenko en octavos de final, con un posible cruce en cuartos contra el chileno Nicolás Jarry o el argentino Francisco Comesaña.
Un torneo sin Alcaraz, pero con Zverev como figura principal
El Abierto de Río de 2025 se está disputando sin la presencia del español Carlos Alcaraz, bicampeón del torneo y gran atracción en ediciones pasadas. Su decisión de iniciar la temporada en Europa ha dejado a Zverev como la gran estrella del cuadro, lo que aumenta las expectativas sobre su desempeño en Brasil.
La ausencia de jugadores de renombre como Holger Rune (12 ATP) y Lorenzo Musetti (17 ATP), sumada a la eliminación prematura de Alejandro Tabilo (28 ATP), ha hecho que los principales contendientes para Zverev sean los argentinos Francisco Cerúndolo (26 ATP) y Sebastián Báez (31 ATP), este último vigente campeón del torneo y con la posibilidad de convertirse en el primer bicampeón del evento.
Zverev y la importancia de la gira sudamericana
Para Zverev, el paso por el Abierto de Río no solo representa la posibilidad de sumar un nuevo título ATP 500, sino también una preparación clave para los torneos en canchas de arcilla que culminarán en Roland Garros. El alemán ha mostrado en el pasado su capacidad de adaptarse a la superficie, y esta gira sudamericana podría servirle para afinar detalles tácticos antes de los Masters 1000 en Montecarlo, Madrid y Roma.
Con un cuadro cada vez más despejado y su condición de principal cabeza de serie, Zverev tiene una gran oportunidad de consolidarse como campeón en Río. Su capacidad para dominar los momentos clave y su experiencia en torneos de esta magnitud lo colocan como el rival a vencer.
Un torneo a la medida de Zverev
A medida que avanza el torneo, todas las miradas están puestas en Alexander Zverev. Su desempeño en la primera ronda demostró que, si bien es el favorito, no tendrá un camino fácil. Sin embargo, con su técnica, potencia y experiencia, el alemán tiene la posibilidad de reafirmar su estatus como una de las principales figuras del tenis mundial y consagrarse en el único ATP 500 de Sudamérica.