Los Nets demuestran que no extrañan ni a Kevin Durant ni a Kyrie Irving

A punta de buen baloncesto, basado en juego colectivo y ahora sin mucho protagonismo de alguno u otro en particular, los Brooklyn Nets han conseguido una victoria que vale oro, dado que la han obtenido jugando en casa de los Denver Nuggets, el equipo más dominante de la conferencia del oeste.

Y que además cuenta con uno de los más completos de esta competición, como el serbio Nikola Jokic, líder absoluto de los triples dobles en esta temporada, y quien por cierto en este duelo ha logrado uno más para su colección.

Sin embargo, en el escenario del “Ball Center” de Denver, y con sus cinco abridores anotando para doble dígito, comenzando por un muy renovado Mikal Bridges, que ahora ha vuelto a destacar como el mejor por Brooklyn, encestando 7 de 16 intentos al canasto y así cerrar la faena con 25 puntos.

Bridges que justo hiciera historia hace pocos días, al convertirse en el primer y único jugador en promediar al menos 25 puntos y encestar para 50% de campo, 40% en triples y 90% en tiros libres en sus primeros 10 partidos en su nuevo equipo, en el cual se le ha visto mucho mejor y con mayor relevancia de la que tenía en los Phoenix Suns.

En esta ocasión, contó con el apoyo del siempre rendidor pívot Nic Claxton y sus 20 puntos, además de los 15 y 14 tantos de los también recién incorporados Dorian Finney-Smith y Cameron Johnson.

Pero destacar también un muy buen partido del escolta Spencer Dinwiddie, quien tal como hacía en su estadía en Dallas, se ha lucido esta vez hasta con 16 asistencias, la máxima de esta temporada, cumpliendo muy bien acá el rol para el cual fue traído a la divisa de Brooklyn.

Un compromiso que los Nets pudieron remontar en la segunda mitad, y definirlo en los segundos finales, para cerrar con una victoria ajustada de 122-120, dejando sin efecto el enorme partido de Nikola Jokic y su triple registro de 35 puntos, 20 rebotes y 11 asistencias.

Así las cosas, los nuevos Nets llegan a 39 victorias en esta temporada y en caso de que los Knicks no puedan obtener victoria este domingo ante los Lakers, estarían más consolidados en esa quinta posición del Este, demostrando además que ya no necesitan ni a Kevin Durant ni a Kyrie Irving para salir adelante, cuando muchos los señalaban de quedar desmantelados.