Your browser doesn’t support HTML5 audio

Con la culminación de la fase regular del baloncesto de la NBA, se comienzan a sondear los posibles candidatos a recibir los galardones más relevantes de la temporada, y en el caso de algunos en particular, no será nada sencillo poder elegir a un solo ganador.

Por ejemplo, mucho se ha hablado de Joel Embiid, Nikola Jokic y Giannis Antetokounmpo para el premio MVP, además del finlandés Lauri Markkanen, ahora jugador del Utah Jazz para el de mejor progreso, así como se llegó a postular a Russell Westbrook para el mejor sexto hombre de la liga, cuando estuvo en ese rol con los Lakers.

Pero hay otro premio muy seguido y que despierta mucha curiosidad entre los seguidores de esta disciplina, y es al mejor jugador de primer año en la NBA, y vale decir que en esta edición, han habido buenos contendores que comenzaron a retumbar desde el mismo momento de su elección en el pasado Draft de la liga.

El primer nombre que asomamos es el de Paolo Banchero del Orlando Magic, ganador precisamente de aquel Draft, y que tuvo el infortunio de no haber podido clasificarse a los Playoffs esta vez, pero con una campaña individual más que resaltante.

El ítalo estadounidense cerró la temporada con 72 partidos disputados, con un muy buen promedio de 20 puntos y 6,9 rebotes por encuentro, con el detalle de que en los primeros 10 partidos como profesional ya sumaba  jornadas de 30 puntos, algo que no se veía desde la época de Michael Jordan, por lo que a las claras es el favorito para ganar este premio.

Otro que será contendor en este galardón es el pick de los Indiana Pacers, Bennedict Mathurin, que de igual forma mostró de lo que es capaz en las primeras semanas de competición, siendo prácticamente el primer seleccionado por el coach Rick Carlisle de los suplentes para comenzar a hacer las respectivas rotaciones.

A tal punto de amenazar la titularidad de Chris Duarte en este conjunto, sobre todo cuando el dominicano no tenía sus buenos partidos; Mathurin estuvo en 78 partidos con los Pacers, y dejó promedio de 16,7 puntos y 4,8 rebotes, pero con el detalle de haber sido el que más tiros libres encestara en un solo juego, con un total de 12.

Keegan Murray fue el seleccionado en la primera ronda de parte de los Sacramento Kings, y del cual se esperaba un muy buen rendimiento, pero tuvo ciertas intermitencias durante la fase regular, aunque fue parte de la histórica clasificación de su equipo a los Playoffs, tras 17 años de ausencia.

Con un promedio algo bajo de 12,2 puntos y 4,6 rebotes culminó la etapa regular, con 80 partidos disputados, pero combinándose muy bien con sus compañeros De’Aaron Fox, Kevin Huerter y Domantas Sabonis, por lo que tiene la chapa de candidato.

Otro que podemos incluir acá es Jalen Williams del Oklahoma City Thunder, quien fuera uno de los responsables de la obtención de victorias importantes para que este equipo se asegurase un lugar en el Play-In de la conferencia del Oeste, y apoyando a su máximo exponente como el canadiense Shai Gilgeous-Alexander.

14,1 puntos y 4,5 rebotes por duelo en 75 compromisos fue el saldo que dejara en esta su primera experiencia como profesional, además de tener que llenar el vacío enorme que dejara el pick de primera ronda, Chet Holmgren.

Por último, mencionamos al tercer seleccionado en el pasado Draft, Jabari Smith Jr, de los Houston Rockets, y en donde ya sabemos que a nivel deportivo las cosas no salieron muy bien para esta franquicia, pero a nivel individual comenzó a hacerse su nombre en la liga.

Smith Jr parecía que en sus primeros duelos podía estar hasta peleando el liderato de anotadores para los jugadores de primer año, junto con Banchero, pero al final cerró con un promedio de 12,8 puntos por juego y de paso con 7,2 rebotes, algo nada despreciable.

Esta carrera por el “Rookie of the Year” tendrá su ganador en los próximos días, antes de que culmine la edición 2022-2023; pero consideramos que Paolo Banchero tiene todos los méritos para hacerse de este importante galardón. ¿Y para ustedes, quién ganará?