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Damian Dillard se ha convertido en un artista para anotar triples en los últimos años y cada vez impresiona con sus disparos desde la larga distancia. En jornada del lunes por la noche, el piloto no perdonó a Los Ángeles Lakers, que no contó con su máxima figura, LeBron James.

El base castigó a los angelinos desde el perímetro mostrándose certeros con sus lanzamientos de tres de puntos para ser el protagonista de la noche en la victoria 127-115 de los Portland Trail Blazers.

El armador dejó estupefacto a los aficionados que se dieron cita en el Moda Center y convirtió uno de los triples más espectaculares de la jornada sobre la chicharra para cerrar con el primer cuarto del partido.

Quedando apenas 1.6 segundos para que culminara el primer parcial, Dillard recibió un balón y de espalda al aro se dio vuelta y lanzó sin pensarlo para convertir y mandar al descanso a su equipo con diferencia de 15 contables de ventaja.

El piloto estuvo intratable en el primer tiempo del encuentro y en el segundo cuarto coronó una gran presentación anotando 24 de las 31 unidades que encestó su quinteto en ese tramo.

La principal figura de Portland finalizó la primera mitad del desafío con 30 puntos, empatando su mejor marca en un primer tiempo en la presente temporada de la NBA. De la misma manera, convirtió ocho triples para igualar su propio récord con la franquicia en una mitad.

El base culminó el compromiso como el mejor anotador con un total de 40 contables, seis rebotes y cinco asistencias en 34 minutos en cancha. Su efectividad en lanzamientos de campo por encima del promedio con 13 canastos en 23 intentos y ocho triples en 14 oportunidades.

El arma mortal de Trail Blazers dejó sus numeritos en 31.0 puntos por partido, 7.3 asistencias, 4.1 en tableros, 46.5% en tiros de campo y 36.9% en lanzamiento de tres unidades en un total de 44 desafíos disputados.

Bajo el pulso de Dillard, los dirigidos por Chauncey Billups sumaron su vigésimo octavo triunfo del año para ubicarse en la undécima posición de la Conferencia Oeste.