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En el partido del Clásico Mundial entre República Checa y Japón, el lanzador nipón Roki Sasaki golpeó  con un lanzamiento descontrolado a William Escala en la rodilla. El picheo fue a 100.9 millas por hora, pese a la velocidad del lanzamiento el jardinero pudo mantenerse en el juego.

Al día siguiente el lanzador se acercó a la concentración de República Checa para brindar uno de los mejores momentos del espíritu de hermandad que reina en el deporte durante este Clásico Mundial. Aunque también hay que dar crédito a la cultura japonesa, que tiene una especial tradición para cuando el lanzador golpea sin intención al bateador, la cual consiste en llevarle un regalo al que recibió el golpe.

El video del especial momento fue publicado en las redes sociales del equipo de República Checa. Además de llevarle a Escala dos fundas repletas de dulces japoneses, también le firmó una pelota y se tomaron fotos para registrar el momento.

“Le pregunté si podía firmarme una pelota como recuerdo para mí. Es algo que guardaré, atesoraré y nunca olvidaré“, dijo el jugador de República Checa a MLB.com.

“Estoy muy feliz de haberlo conocido y mostrarle el moretón”, dijo Escala. “Era una persona increíble: me trajo un montón de bocadillos. Ahora los estoy compartiendo con el equipo, así que fue muy divertido pero también genial”.

El mánager checo Pavel Chadim dijo sobre el gesto de Sasaki: “Me recordó que el béisbol no es solo una guerra o un negocio, sino un deporte de caballeros. La disculpa de Sasaki nos conmovió”.

Sasaki es un as en ascenso en Japón, tiene solo 21 años y ya lanzó el decimosexto juego perfecto en la historia de las grandes ligas japonesas en abril pasado, luego lanzó ocho entradas perfectas en su siguiente apertura antes de ser retirado de la lomita, después de 102 lanzamientos. Tuvo marca de 9-2 con efectividad de 2.02 para los Chiba Lotte Marines de la Liga del Pacífico la temporada pasada, ponchando a 173 en 129. 1 entradas de labor.

En el partido contra los checos, el lanzador derecho otorgó ocho ponches en 3.2 innings y se acreditó la victoria. Permitió una carrera sucia, dos hits y dos boletos.