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En el día de Jackie Robinson, es decir, el 15 de abril, Domingo Germán consiguió su primera victoria en esta temporada con los Yankees de Nueva York. Fue una actuación exquisita, llena de talento y mucho control por parte del serpentinero dominicano, pero dañada por la polémica. Un intercambio de palabras con los umpires por parte del jugador y del cuerpo técnico de su equipo, además de constantes reclamos del conjunto rival pusieron en tela de juicio la seriedad de su trabajo.
A pesar de la apertura de calidad del oriundo de San Pedro de Macorís, quien en un lapso de 6.1 entradas propinó 11 ponches, no concedió boletos, toleró apenas 3 imparables y recibió sólo una rayita, el tema del uso de una posible sustancia prohibida para mejorar el agarre de la bola colmó la atención de propios y extraños.
¿Qué aconteció realmente?
En un video que se ha difundido recientemente, se puede escuchar y observar lo que realmente ocurrió con el pitcher quisqueyano. La conversación se dio entre el mánager de los Mulos del Bronx, Aaron Boone, el árbitro principal y el intérprete del abridor yankista. Sin embargo, fue un usuario de Twitter quien se encargó de transcribir todo desde la lectura de los labios de los presentes.
Aunque el elemento que usó Germán para aferrarse bien a la esférica es legal, la forma en la que lo usó no lo es tanto. Si bien todo hombre que sube al montículo tiene derecho de emplear la famosa ‘perrubia’ (más conocida en el mundo químico como colofonia), debe hacerlo detrás de la lomita, a la vista de todos, especialmente del umpire del plato.
No obstante, parece que Domingo se estaba aplicando la sustancia en el dugout algo que, si bien no amerita sanción, no agradó nada a las autoridades. Por eso, le manifestaron que se lavara las manos y volviera para ser chequeado, algo que no acató en primera instancia y molestó visiblemente al árbitro. Aun así, la cosa no pasó a mayores después de que intercediera el timonel Boone y alegara que todo se trataba de un malentendido. Acudieron a un traductor, y la cuestión quedó zanjada.
¿Hicieron bien los umpires en permitir la continuidad del isleño ante esta situación? Nadie lo sabe a ciencia cierta, pero seguro los umpires estarán con los ojos muy abiertos en el futuro inmediato frente a algo similar.