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Llegó al Bronx a finales del 2021, seis años después de haber irrumpido en Ligas Menores con los Filis de Filadelfia y si bien sus 46 jonrones en este lapso con la franquicia de Pensilvania, no eran la muestra exacta de su poder a la ofensiva, sus habilidades con el guante lo situaban en una posición privilegiada para pensar en un posible ascenso a Grandes Ligas.
Con casi seis pies y 180 libras de peso, Rodolfo Durán acabó recalando en las granjas de los Yankees de Nueva York, con average de por vida de 244 y un porcentaje de cogidos robando del 40%, tal como lo reseñó por aquel entonces MLB.com.
Al instante todos comenzaron resaltar su condición de prospecto de élite y con los Mulos inmersos en resolver el dilema de la receptoría en el primer equipo, Durán se mostraba como una alternativa viable de cara al futuro cercano.
La proyección
El criollo había chocado con las exigencias del nivel triple A en 2021, mientras estaba en Filadelfia, pero con los Bombarderos debió comenzar por doble A y en 53 desafíos con Somerset- Patriots, bateó apenas para 222, sin embargo sus 9 jonrones y 33 remolcadas, así como su slugging de 414 y su OPS de 680 dejaban entrever la perspectiva que Durán podía aportar mucho más.
En este contexto, al llegar el invierno volvió a la LIDOM con las Estrellas Orientales, sumó más turnos, no bateó mucho, pero aprovechó para pulir su mecánica con la mirada puesta en los Entrenamientos de Primavera.
El show de Rodolfo Durán
Hace poco más de un mes pudimos verlo con los Yankees en los juegos de pretemporada y no lo hizo mal, pero a horas del Juego Inaugural, acabó siendo enviado a triple A.
Con Scranton/ Wilkes- Barre RailRiders, el quisqueyano se ha desbordado y al momento de redactar este texto, en 13 juegos está recortando para una línea de 306/359/592, con 3 jonrones, 5 dobles y 11 carreras empujadas, tocando fuerte a las puertas de Las Mayores.
Es así, el tiempo ha pasado y a sus 25 años, con los Yankees urgidos de bates calientes, Rodolfo Durán podría dar el gran salto y pisar por primera vez un diamante de Grandes Ligas.
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