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Abril se acaba y un mes después de comenzar la nueva temporada de Grandes Ligas, muy pocos o casi nadie hubiese pensado que los Yankees de Nueva York, estarían subsistiendo en el cuarto lugar de la División Este de la Liga Americana.

Así es, tal como lo lee, en este minuto mientras escribo, con forja de 14-11, los Bombarderos del Bronx miran de soslayo a los Medias Rojas de Boston, ocupantes de la última posición.

El contexto

Las lesiones han incidido en el resultado, eso es un hecho; Carlos Rodón, Luis Severino, Frankie Montas, Giancarlo Stanton y Josh Donaldson por solo citar, pero igual; son los Yankees y al menos debían existir alternativas para sopesar este tipo de situaciones.

A las intermitencias de hombres como Clarke Schmidt y Jhony Brito, se le han añadido las carencias en materia de bullpen y una merma ofensiva que preocupa a fanáticos y especialistas, ello a pesar de que solo está terminando abril.

“El infierno de Arlington”

En medio de este contexto, dentro de unas horas, los Mulos asumirán el que tal vez sea su primer gran reto en este inicio de temporada…jugar en Texas, en “el infierno de Arlington”.

Hay momentos y circunstancias que te pueden marcar para siempre, condicionando tu futuro inmediato para bien o para mal y este duelo ante los renacidos Vigilantes de Bruce Bochy (Líderes de la División Oeste) ostenta los matices necesarios para ser tomado en cuenta de esta manera que comentábamos.

Realidades

Será un cierre de semana trepidante este que de seguro se vivirá en Arlington y si bien el “imposible” Gerrit Cole llega con sin conocer la sombra de la derrota, amparado en una efectividad de 0,79; si por un lado está Cole, por el otro, la batería de los “chicos malos” del Oeste llega caliente a este cotejo, con dos claros referentes en hombres como Marcus Semien (batea 310 con 4 jonrones y 16 empujadas en los últimos 15 juegos) y José  Adolis García (promedia 407 con 3 jonrones y 12 impulsadas en los últimos siete encuentros).

Y está Gerrit Cole, pero también estará como un duro escollo en la trinchera contraria el zurdo Andrew Heaney y el viernes Jacob deGrom, quien luego de un desastroso debut frente a los Filis en el Juego Inaugural se volvió a encontrar y hace solo unos días frente a Oakland, con 11 ponches entro al top 15 histórico entre los lanzadores con mayor cantidad de aperturas con 10 o más ponches.

De igual modo a pesar del buen paso de Néstor Cortés Jr, el impacto de hombres como Nathan Eovaldi y Martín Pérez le complica las cosas a la tropa de Aaron Boone.

La disyuntiva

¿Habrá masacre en Texas?, emerge la disyuntiva de cara a lo que pueda acontecer en el Globe Life Field con los Bombarderos, aunque en este punto la afición se aferra a la idea que el despertar de los bates contra Minnesota este miércoles (fabricaron 12 carreras), puede ser un buen augurio.

¿Qué pasará?, ¿arrollarán los Vigilantes a los Yankees?, ¿sacarán la casta los del Bronx?, el terreno como siempre nos dirá.