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Si algo bueno ha pasado en la vida de Edward Olivares es el aprendizaje. El venezolano, quien este viernes jugará su último partido en República Dominicana le agradece mucho a las Estrellas Orientales todo lo vivido en esta temporada. “Esta liga es una liga muy exigente y de verdad me siento muy complacido con el equipo, con la gerencia, mis compañeros, con todos, por lo vivido y lo que he aprendido este año”.

Olivares, quien en la ronda regular registró una línea ofensiva de .267/.336/.408 con 12 extrabases, diseminados en nueve dobles, un triple y dos jonrones, será extrañado en la cueva de los paquidermos. El Arepa Power, integrado por él, José Briceño Enmanuel De Jesús marcó un punto de inflexión en el dugout de los verdes.

“Gracias a Dios me fue bien”, explica. “De verdad me fue bien, estuve saludable. Una liga súper buena y gracias por la oportunidad“.

El circuito dominicano es una liga de pitcheo. “Oye, aquí me topé con muchos lanzadores de 99 y 100 millas por hola. Ni hablar de la competitividad. Creo que el haberlo enfrentados va a ser muy positivo para mí el año que viene”, contó el criollo.

A pesar de pertenecer a los Tigres de Aragua en la pelota rentada venezolana y luego de haber jugado con los siderales gracias a un permiso especial, el grandeliga de los Orioles de Baltimore no estará compitiendo con los maracayeros en la Lvbp. “No, ya está bueno”, confesó. “Estoy en esto desde enero . Voy a descansar y a prepararme para el 2023, con el favor de Dios“.

Los verdes tienen ya su suplente listo para esta contingencia, pero todos saben que un bate de ese calibre siempre será difícil de suplantar. Olivares, además, le ha dado prestancia a los jardines de los petromacorisanos y ha formado una verdadera muralla en el bosque derecho junto a Christian Pache, jardinero central de los paquidermos.

Sobre su participación en el Clásico Mundial, el venezolano indicó que está preparándose para el certamen. “Hemos estado hablando (Omar López y él). Estoy disponible para ir a jugar al Clásico y jugar para Venezuela”.

Sobre Fernando Tatis padre dijo que era un ejemplo a seguir y que la ética de trabajo del dirigente era excepcional. Una de las cosas que más me gustó fue cómo se trabaja dentro del equipo.

Se descompleta así el “Arepa Power”, el grupo de venezolanos que había dentro de los petromacorisanos con José Briceño y Emmanuel de Jesús. “Siempre andamos juntos. ¡Arepa power!”. Seguro lo extrañarán mucho por aquellos lares.