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Un equipo con una historia futbolística rica y una afición apasionada, pero también una trayectoria plagada de finales perdidas que han dejado huella en la memoria colectiva.

Un Dolor Mundialista: El recuerdo más amargo para los ingleses es sin duda la final de la Copa Mundial de 1966, disputada en casa. Tras un emocionante partido contra Alemania, el marcador terminó empatado 4-4, llevando el encuentro al tiempo extra. Un gol polémico de Geoff Hurst, conocido como el “Gol fantasma”, le dio la victoria a los ingleses. Sin embargo, la jugada aún genera controversia hasta el día de hoy, alimentando la sensación de injusticia para la afición alemana.

La Eurocopa, un espejismo esquivo: La Eurocopa ha sido otro torneo esquivo para Inglaterra. A pesar de haber llegado a la final en 2020, sucumbieron ante Italia en una tanda de penales. En total, han perdido dos finales de este campeonato, la otra en 1968 contra Alemania.

Más lágrimas en otras competencias: La lista de finales perdidas por Inglaterra no se limita a la Copa Mundial y la Eurocopa. También han perdido la final de la Copa Kirin en 1979 y la Copa Rous en 1989.

Las finales perdidas forman parte de la historia del fútbol, y para Inglaterra han sido momentos dolorosos que han marcado a generaciones de aficionados. Sin embargo, también han servido como motor de impulso para seguir buscando la gloria. La Selección Inglesa no se rinde, y su hambre de victoria sigue viva.