La Selección Argentina enfrenta un momento crucial en las Eliminatorias Sudamericanas. El equipo de Lionel Scaloni se medirá este martes ante Bolivia en el Estadio Monumental, y aunque el foco está puesto en la vuelta de Lionel Messi tras 333 días de ausencia en suelo argentino, hay otra preocupación que pesa sobre el cuerpo técnico: diez jugadores del plantel están al límite de amonestaciones.
Gonzalo Montiel, Germán Pezzella, Enzo Fernández, Exequiel Palacios, Leandro Paredes, Alexis Mac Allister, Rodrigo De Paul, Giovani Lo Celso y Lautaro Martínez conforman la lista de futbolistas que acumulan una tarjeta amarilla. Si alguno de ellos recibe una nueva amonestación en el partido contra Bolivia, se perderá el siguiente encuentro, que será en Asunción ante Paraguay el 14 de noviembre. Ese duelo, correspondiente a la fecha 11, será clave para consolidar a la Albiceleste en la cima de la tabla.
El desafío para Scaloni será gestionar el esfuerzo de estos jugadores, especialmente en una fase de Eliminatorias en la que cada punto cuenta para asegurar la clasificación al Mundial 2026. Argentina lidera actualmente con 19 puntos, tres más que Colombia y cuatro sobre Uruguay, y aunque Si se encuentra en una posición sólida, perder a varios de sus titulares podría complicar los próximos compromisos.
El arbitraje estará a cargo del peruano Kevin Ortega, acompañado en el VAR por su compatriota Diego Haro. El encuentro comenzará a las 20 horas (hora en Dominicana) y marcará el regreso de Messi a la acción con la selección en Argentina, un aliciente para los hinchas que llenarán el Monumental.
A pesar de la expectativa por ver nuevamente a Messi en su tierra natal, la situación de los jugadores al borde de la suspensión añade un componente estratégico importante al duelo. La gestión de Scaloni será clave no solo para asegurar los tres puntos ante Bolivia, sino también para llegar con un equipo completo y competitivo a Asunción, donde se enfrentarán a un Paraguay siempre complicado en con
La situación de las tarjetas amarillas en las Eliminatorias es una preocupación constante para los entrenadores, quienes deben balancear entre la necesidad de sumar puntos y evitar bajas sensibles en momentos decisivos. Con Bolivia como próximo desafío, la Albiceleste deberá mantenerse concentrada y evitar que las amonestaciones se conviertan en un problema mayor.