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Históricamente el boxeo ha sido un deporte que en Estados Unidos ha movido a los aficionados a realizar fuertes inversiones en la modalidad de Pago Por Visión (PPV). Esta modalidad consiste en un  servicio opcional para el cliente, que accede mediante ese pago extra a un contenido que puede ser visto de forma simultánea por otros usuarios en un momento concreto.

Con esta modalidad de distribución de las veladas boxísticas para los Estados Unidos, se  busca incrementar los ingresos de las carteleras más llamativas de esta disciplina.

Esta modalidad se implementa por primera ocasión en el  tercer combate entre Muhammad Ali y Joe Frazier, el famoso ‘Thrilla in Manila’ de 1975, abriendo la puerta a un negocio muy lucrativo que supieron exprimir al máximo los promotores Don King y Bob Arum. La pelea que disputaron ‘Sugar’ Ray Leonard y Thomas Hearns terminó de asentar el ‘invento’ dado su gran éxito.

Tras el éxito de la modalidad en la época de “Sugar” Ray, llegamos al fenómeno de Mike Tyson, cuyo boxeo fue conocido en todo el mundo gracias a la televisión. El PPV alcanzó en Estados Unidos una nueva dimensión con ‘Iron Mike’. Su combate de regreso contra Peter McNeeley tras salir de prisión batió récords. Después llegó la duología con Holyfield, que trajo grandes beneficios económicos.

Tras el éxito de Tyson, el testigo lo recogió Óscar de la Hoya manteniendo la modalidad de PPV con una gran rentabilidad, fue Maywether. ‘Money’ quien mejor supo explotar su imagen para atrapar a los fans, quienes rompen récord en pagos por visualización, siendo la pelea ante Manny Pacquiao la velada de mayor valor por PPV, rondando los 100$ por suscripción.

Tras el retiro de Floyd, Saul “Canelo” Alvarez, se convirtió en el  heredero, siendo el Mexicano el mayor éxito en la pequeña pantalla.

En la actualidad  los precios por PPV  están volviendo a subir, pero precisamente es Canelo el único que congrega a grandes audiencias. Se están cobrando las veladas de diversos pugilistas como Gervonta Davis, Errol Spence o David Benavidez a unos precios astronómicos, mucho antes de que se hayan fidelizado al gran público.

Tras la pelea entre Floyd Mayweather y Manny Pacquiao, que recaudó alrededor de 4,6 millones de dólares por concepto de pago por visualización, no se ha visto una velada que supere esos ingresos económicos.

La velada del  próximo 22 de abril, entre  Gervonta Davis y Ryan García, busca romper el récord impuesto por la Mayweather-Pacquiao, hasta el momento la pelea entre David y Garcia, tendrá un costo de 84,99$, mas 10$ por disfrutar la pelea en calidad HD, siendo uno de los mayores precios por la modalidad de PPV tras la Mayweather vs McGregor.