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La relación entre Karl-Anthony Towns y Anthony Edwards ha sido atípica si la comparamos con la dinámica habitual de otras duplas de estrellas en la NBA. Mientras que el ascenso meteórico de Edwards lo ha colocado como la figura central de los Minnesota Timberwolves, Towns ha aceptado su rol secundario con naturalidad, demostrando que ser una estrella no siempre significa ser el centro de atención. Sin embargo, algunas voces aún insisten en que la coexistencia entre ambos podría ser un desafío. Towns ha querido aclarar esta percepción en el podcast de Paul George, dejando claro su apoyo incondicional a su compañero: “Yo soy el mayor fan de Ant“, comentó para zanjar cualquier duda sobre su relación.
El dominicano no solo ha dado un paso al costado para dejar brillar a Edwards, sino que ha adoptado un papel de mentor y hermano mayor. “Quiero verle ganar, quiero verle siendo la cara de la NBA. Somos como hermanos mayor y pequeño”, añadió Towns, subrayando que su apoyo es genuino y que su objetivo es ver a su joven compañero alcanzar el estrellato.
Desde la llegada de Edwards a la liga, Towns ha visto cómo sus intentos a canasta y su promedio de anotación han disminuido, reflejando su voluntad de ceder protagonismo. Durante la temporada 2022-23, promedió 14,8 tiros por partido y 20,8 puntos, una disminución que Towns ha aceptado sin quejas. De hecho, el entrenador de los Timberwolves, Chris Finch, le ha pedido que sea más agresivo de cara a la próxima campaña, buscando equilibrar su rol en el equipo.
A pesar de que en el pasado el pívot fue crítico con aspectos como la dieta de Edwards en sus primeros años, la relación entre ambos ha evolucionado de manera positiva, como lo demuestra su camaradería dentro y fuera de la cancha. Towns compartió una anécdota en el podcast, ilustrando su admiración por Edwards: “Este verano estaba de vacaciones en Roma y vi a un chico con la camiseta de Ant. Le dije que su camiseta era genial y le pedí si podía hacerle una foto y enviársela a Edwards como si fuera un fan. Él me miró y me dijo, ‘¿Karl?'”, relató entre risas.
La química entre Towns y Edwards parece estar en su mejor momento, y los Timberwolves esperan que esta conexión se traduzca en éxito en la cancha. Mientras Edwards continúa su ascenso hacia la élite de la NBA, Towns sigue firme en su papel de apoyo, demostrando que el verdadero liderazgo no siempre implica ser el foco de atención, sino saber cuándo es el momento de ceder y apoyar.
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