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Los Toronto Raptors han anunciado que Scottie Barnes estará fuera de competición durante al menos tres semanas debido a una fractura en el hueso orbital de su ojo derecho. Barnes sufrió la lesión tras un fuerte codazo de Nikola Jokic en la lucha por un rebote durante el partido del lunes contra los Denver Nuggets. El alero deberá ser reevaluado a mediados de noviembre para determinar si está en condiciones de regresar al equipo.

Esta baja se suma a una preocupante lista de ausencias en los Raptors. Bruce Brown y Kelly Olynyk aún no han podido debutar esta temporada, mientras que Immanuel Quickley solo ha jugado un partido. La situación se agrava considerando que el equipo había decidido construir su futuro en torno a jóvenes promesas como Barnes, Quickley y R.J. Barrett, tras desprenderse de veteranos clave como Pascal Siakam y O.G. Anunoby el año pasado. Ahora, el entrenador Darko Rajakovic enfrenta el desafío de mantener la competitividad de un equipo que marcha 1-3 y que probablemente acumule más derrotas sin su All-Star.

La ausencia de Barnes no solo afecta el rendimiento inmediato de los Raptors, sino también sus planes de desarrollo. Este año se proyectaba como una oportunidad clave para que los jóvenes talentos asumieran roles de liderazgo y asentaran las bases de un proyecto a largo plazo. Sin embargo, la lesión del jugador de 22 años podría ralentizar este proceso y obligar a Rajakovic a reajustar su estrategia mientras espera el regreso de su estrella en ascenso.