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Son imágenes, bien nítidas, pasan como flashazos, pero en esencia las puedo distinguir bien; El grito de Munch, Vicent Van Gogh cortándose la oreja, Hölderlin delirando y Maupassant picándose las venas en un hospital de Francia, luego aparece él, Austin Meadows, mirando de soslayo mientras se alista para asumir su turno en una jaula de bateo.
Meadows solo quiere jugar béisbol, pero padece de trastornos de ansiedad y quizás no sabe de Munch, de Van Gogh, de Hölderlin y Maupassant, sin embargo, en su historia, de cierto modo se recoge la esencia de aquellas otras historias, todas marcadas por la locura.
Podía empezar así o también hablando de esa noticia de hace solo unos días; la misma que con el paso de las horas pareció difuminarse en medio de la vorágine mediática que genera a diario la nueva temporada de Grandes Ligas.
El suceso
En un primer momento se habló de problemas mentales, pero lo cierto es que el pasado fin de semana, los Tigres de Detroit colocaron en la Lista de Lesionados de 10 días al mencionado Austin Meadows, debido a “problemas de ansiedad”.
Y en este punto usted de seguro ni se acuerda de Meadows, dirá, ¿quién es? y entonces al buscar encontrará que se trata de un jugador de 27 años, nacido en Georgia y con sus casi dos metros de estatura y 100 kilos de peso ostenta el biotipo ideal del clásico slugger en Las Mayores.
Eso fue lo que vimos en 2019, durante su segunda temporada al primer nivel, cuando vistiendo la franela de los Rays de Tampa Bay, Meadows compiló para 291 de average, con 33 jonrones y 89 carreras impulsadas, quedando en el puesto 14 en la votación para el MVP.
Dos años después, de igual modo con los Rays, repetiría entre los 20 primeros, gracias a sus 27 jonrones y 106 remolques, pero hasta ahí, al partir hacia Detroit, aquella llama fulgurante se apagó.
El drama de Meadows
Para ese entonces los trastornos de ansiedad lo desbordaban y por ello solo pudo jugar 36 encuentros en 2022, ya que debió salirse de la temporada para recibir tratamiento, tal como reseñaron en su momento MLB.com y CBSSports.
Regresó está primavera y en 19 desafíos recortó para 240/304/320, con 4 dobles y 8 carreras empujadas y en perspectiva, según cuentan, Meadows parecía listo para volver al ruedo y al menos pensar en acercarse al rendimiento de aquellos años.
No fue así, antes del 8 de abril, solo pudo estar en 6 partidos, dejando un endeble 238 de promedio con 2 remolques.
El misterio
De su triste situación se ha develado poco. La franquicia le ha brindado apoyo, pero en concreto no se han dado detalles al respecto, algo que sin dudas agranda el halo de bruma que se muestra alrededor de la figura de Meadows.
En este sentido el beneficio de la duda da para pensar al respecto y tal vez todo se deba a la frustración por no tener un mejor contrato, al deseo de ser mejor y demostrar cualidades que a la postre aumenten su valor en el mercado, puede ser eso o simplemente una condición natural y entonces solo nos resta quedar sometidos al misterio.
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