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-Serán otra vez últimos- era lo que decían meses antes de que arrancara la nueva temporada beisbolera en Grandes Ligas y es lo que ha pasado, como si se tratase de una larga historia que tiende a repetirse cada cierto tiempo con matices bastante similares.
La temporada empezó y dos semanas después, con registro de 5-8, los Medias Rojas de Boston tocan fondo en la División Este de la Liga Americana.
El mismo guion
Han retomado el camino por donde mismo lo dejaron a finales de 2022 y muchos se negaron a creer que sería de este modo, el propio dirigente Alex Cora apostaba por su grupo; se habían marchado Xander Bogaerts, JD Martínez y Michael Wacha por solo citar y el hombre que tocó la gloria como timonel en 2018 al ganar la Serie Mundial contra los Dodgers, se negaba a aceptar que las cosas irían igual o peor…
Era la crónica de una muerte anunciada. La gerencia se había hecho con los servicios de figuras experimentadas como Justin Turner y Corey Kluber, pero eran una especie de remiendo. La realidad solo le daba el beneficio de la duda al estelar toletero nipón, Masataka Yoshida como uno de los buenos movimientos de la temporada baja.
En medio del caos, Rafael Devers
Sin embargo, en medio de este halo de oscuridad que rodea a la emblemática franquicia de Massachusetts, emerge una esperanza y la misma tiene un nombre…Rafael Devers.
Luego de que la organización hiciera oficial una extensión de contrato por 11 años y 331 millones de dólares, el criollo ha salido dispuesto a refrendar con creces su valor.
La figura
Al momento de escribir este texto, Rafel Devers ha visto acción en 12 partidos de la campaña, dejando una hoja de corte de 280/321/640, con 5 cuadrangulares, 3 dobles y 12 carreras impulsadas.
En este punto cabe resaltar, tal como le expresó Cora a ESPN digital hace unos días, que el impacto de Devers no se circunscribe al plano individual, también el antillano ha logrado asumir como el líder que necesitan los Medias Rojas para buscar un buen resultado y por ende revertir la mala imagen de los últimos tiempos.
Como lo lee, a sus 26 años, Rafael Devers se muestra como el argumento perfecto para que la gente en Fenway Park pueda recuperar la ilusión… ¿usted qué piensa?
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