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De no creerse lo que acaba de ocurrir en el Kauffman Stadium. Edward Olivares puso a estallar a los fanáticos de los Reales de Kansas City con violento cuadrangular para empatar el partido, pero terminó protagonizando un hecho particular en las Grandes Ligas.
El venezolano le dio con toda su fuerza en la parte baja del octavo inning para acreditarse su jonrón más largo de su carrera en Las Mayores. Sin embargo, la conexión del jardinero fue tan contundente que terminó rompiendo la pantalla grande en el estadio de los Royals.
El patrullero terminó descifrando los envíos del relevista Chad Kuhl para mandarla a volar por todo el jardín izquierdo para igualar el marcador y comenzar con la remontada de los locales, en el octavo tramo. El bambinazo de Olivares salió a una velocidad de 111 millas por hora y recorrió una trayectoria de 452 pies de distancia.
La potente conexión pegó de lleno en la pantalla del Kauffman Stadium dañando por completo la zona donde recibió el impacto. De hecho, la pizarra del recinto empezó a salir humo dejando una muestra del poderoso vuelacerca.
Para el guardabosque fue el cuarto jonrón en la presente temporada y terminó siendo figura en la victoria de su equipo tres rayitas por dos sobre los Nacionales de Washington. MJ Meléndez anotó la carrera del triunfo tras un imparable de Michael Massey, en la parte baja de la novena entrada.
Por su parte, Olivares cerró la jornada como uno de los más destacados al ligar de 3-1 con una producida y anotada. El nativo de Caracas dejó sus números en .237 de promedio al bate, cuatro cañonazos, 11 remolcadas, 22 anotaciones, 33 hits, cinco bases estafadas, siete dobles, par de triples y .691 de OPS en 41 juegos disputados.
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