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Con la temporada de la NBA a la vuelta de la esquina, Oklahoma City Thunder se presenta como uno de los equipos más emocionantes y con mayor proyección. Después de una brillante campaña en 2023-24, el equipo de Mark Daigneault estaba a un par de pasos de convertirse en un verdadero aspirante al título. Este verano, la gerencia de OKC se movió con precisión, sin hacer grandes locuras, pero apuntando a lo que realmente necesitaban: fortaleza bajo los aros y mayor solidez defensiva en el perímetro.

La llegada de Isaiah Hartenstein y Alex Caruso ha sido uno de los movimientos más elogiados en la liga. Mientras Hartenstein ofrece una presencia clave en la pintura, Caruso, conocido por su tenacidad defensiva y capacidad para aportar en ataque, es visto como el guard ideal para reforzar a un equipo en ascenso. El propio Caruso, en una reciente entrevista con TexAgs Radio, se mostró muy optimista sobre su rol en los Thunder.

“Creo que el éxito que tuvieron los Thunder el año pasado habla por sí solo. Ser el primero en el Oeste es una tarea difícil debido a la cantidad de talento que hay en la Conferencia Oeste. Ahora se han agregado algunas piezas en la offseason, incluyendo algunos jóvenes. Isaiah Hartenstein y yo somos jugadores que pueden encajar de manera fenomenal en el equipo”, comentó Caruso, quien confía en que su versatilidad será crucial para el equipo.

Reencuentro con Mark Daigneault

Además de su entusiasmo por unirse a un equipo con ambiciones de campeonato, Caruso también destaca su relación personal con el entrenador Mark Daigneault, con quien coincidió durante su tiempo en la G League en los Oklahoma City Blue. Esta conexión previa le da una confianza adicional para rendir al máximo en su nueva etapa.

“Tenemos una gran relación. Sé qué esperar de él y él sabe cómo entrenarme y presionarme. Si hubiera una palabra para describirlo, simplemente diría que estoy emocionado”, confesó el guard. La familiaridad entre ambos promete facilitar su adaptación y contribuir al éxito del equipo.

Una oportunidad para el campeonato

La llegada de Caruso y Hartenstein eleva las expectativas en OKC, que ya cuenta con un núcleo joven liderado por Shai Gilgeous-Alexander y Josh Giddey. Los Thunder buscan dar el salto definitivo para consolidarse como uno de los equipos más temidos de la liga, y la incorporación de estos jugadores podría ser la clave para lograrlo.

Con su habilidad para influir en ambos lados de la cancha, Caruso está convencido de que este será un año especial para él y para los Thunder. El equipo de Oklahoma City tiene todos los ingredientes para pelear por lo más alto en la Conferencia Oeste, y Caruso está listo para ser una pieza fundamental en ese camino hacia el éxito.