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Como el último de los mohicanos, así salió el dominicano Anel Castillo de los tatamis de San Salvador hace solo unas horas, esto tras colgarse la medalla que quedaba en disputa dentro de la competencia del karate correspondiente a los XXIV Juegos Centroamericanos y del Caribe.
El quisqueyano, contendiente de los 84 kilogramos, llegó a suelo salvadoreño con el aval de dos coronas regionales a cuestas, las mismas que había obtenido en las justas efectuadas en Veracruz 2014 y Barranquilla 2018 y hoy, allí en la principal urbe de El Salvador, tampoco defraudó.
Los hechos
Minutos después de que la dominicana, Pamela Rodríguez, se impusiera 8-7 en un vibrante combate final a la colombiana Shanne Torres en la división de +68 kilogramos, minutos después, un imponente Anel Castillo sacó la casta contra el también cafetero Diego Lenis.
Con sutil maestría, Castillo hizo gala de su clase, sobre todo en el aspecto táctico, solventando con agilidad las embestidas del colombiano Lenis y ripostando con golpes precisos en los tramos decisivos del combate, para llevarse el triunfo 7-4.
Actuación memorable
El Polideportivo “Cuna del Mágico” se mostró como el escenario ideal para que los nuestros disertarán de un modo tan contundente y en el momento que más lo necesitaba el país.
Fue la mejor de las despedidas para una disciplina que superó con creces las expectativas y es que a los metales dorados de Pamela y de Anel se le sumó la medalla de bronce alcanzada por Cristian Tello.
Tras estos resultados y al instante de escribir este texto, la delegación dominicana sumaba un total de 110 medallas, repartidas en 24 de oro, 36 de plata y 50 de bronce, superando la cifra de 107 preseas, alcanzadas en Barranquilla hace cinco años. Una gesta que se pudiera decorar en solo unas horas, con el título de las Reinas del Caribe en el voleibol femenino.
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