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No quieren ceder, no lo harán y según cuentan, ya muchos hablan del infierno de Salt Lake City y es que los Jazz de Utah, no quieren quedarse con la ilusión de saber lo significa estar en una postemporada.
Como lo lee, luego de notables ascensos y estruendosas caídas, los chicos del sorprendente Will Hardy parecen decididos a pelear a muerte al menos ese último pasaje para los llamados Play- In.
Cuando algunos pensaron que aquella apasionante historia que inició a finales de octubre había acabado, el guion se ha vuelto a torcer y hace solo instantes en su propio feudo lograron una épica remontada frente a los Boston Celtics, que en el elemento anímico, bien puede valer los playoffs.
El desafío
Fue uno de esos juegos electrizantes desde el comienzo, de los que te enganchan y no puedes moverte del asiento hasta el final, al punto de que cuando los de Nueva Inglaterra ganaban por casi veinte puntos en la segunda mitad, en el ambiente se respiraba la idea de que la trama podía dar un vuelco favorable al elenco de casa y así fue…
Por un punto, 118-117 ganaron los Jazz, aprovechando un desliz del prominente Grant Williams, quien recibió un inesperado tapón que a la postre condicionó la derrota para los verdes.
Las figuras
El cotejo se decidió ahí, en esas fracciones de segundos, pero de igual modo no se puede soslayar el formidable desempeño una vez más de un hombre como Lauri Markkanen con 28 puntos y 10 rebotes, así como Talen Horton – Tucker autor de 19 tantos y Walker Kessler, quien facturó 12 cartones y 14 rebotes.
A su vez, vale reseñar que por los Celtics, descolló Jaylen Brown con 25 puntos, 4 rebotes y 6 asistencias.
Volviendo con Utah, tenemos que con el resultado arribaron a marca de 34-36, situándose décimos en la Conferencia Oeste, manteniendo la dura porfía con el Thunder, además de los Lakers y los Pelicans.
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